A todos nos hace mucha ilusión recibir la cesta de Navidad. Un regalo que las empresas tienen en cuenta para trabajadores, clientes y proveedores por sus productos gastronómicos. Ahora bien, una vez la cesta se vacía, ¿qué podemos hacer con ella? Mira las maneras de reutilizar la cesta de tu lote de Navidad.

Debemos pensar que la gran parte de cestas tradicionales para este fin son de mimbre, un material natural, ecológico y de origen vegetal que ofrece diversidad de usos. Esta fibra procede del arbusto de la familia de los sauces y se utiliza el tallo y las ramas de la planta. Es muy fácil de trabajar y posee una gran resistencia, y por esto se emplea en diversos campos de actividad.

1. Centro de mesa

Dependiendo del tamaño, materiales y otros, esta cesta puede usarse, posteriormente, como centro de mesa. Así se convierte en un elemento decorativo donde dejar flores o plantas, fruta o bien velas, eso ya es a gusto de cada usuario.

2. Revistero para casa

A veces, una simple cesta navideña puede ser un elemento decorativo sin más que podemos dejar en un rincón de nuestro salón.

Pero si queremos darle un uso, la podemos usar, por ejemplo, como revistero para casa. Allí dejaremos revistas, periódicos y otros materiales de consulta para tener a mano. ¡Quedará estupenda en nuestro rincón de lectura!

3. Panera

Si el tamaño de la cesta es pequeño, y rectangular, entonces nada mejor que usarla como panera. La idea es dejar ahí el pan, sea en rebanadas, cortado, o en trozo enteros. Lo podemos situar en un lugar de la cocina o bien que la cesta sea para servir el pan cuando comemos o tenemos invitados en casa.

4. Macetero

Uno de los usos más extendidos de la cesta del lote de Navidad es utilizarla como macetero. Esto sucede, normalmente, cuando se trata de grandes o medianas dimensiones. Allí situaremos flores que van bien en diferentes estancias, desde el salón, donde va a lucir mucho más, a la terraza, en el caso de que las planas sean de exterior.

Para reconvertir esta cesta en una maceta, tan solo debemos tener presente aislarla con un plástico interior, lo agujereamos para que sirva de drenaje para el agua, situamos tierra y plantamos aquello que queramos.

Así nuestra casa se convierte en un súper jardín lleno de plantas que nos dan un toque de humor y positivismo.

 5. Canasta para guardar o transportar ropa

Esta cesta de Navidad, si no tiene grandes dimensiones, también se puede utilizar como canasta cuya finalidad es guardar o transportar ropa de un lugar a otro de la casa. Es un objeto bello, pero que, a la vez, tiene este doble o tercer uso que todos queremos y que nos falta en casa.

Es más, no solamente puedes guardar ropa, hay quien, además, la tiene como mueble auxiliar en la cocina o en el baño. Ahí se sitúan algunos de los principales objetos de aseo o toallas bien ordenadas. Y si tienes un bebé, sirve de canastilla para dejar su ropita o enseres (para tenerlos más a mano) en el baño o bien en su habitación. ¡Amarás las cestas de Navidad antes y después de quitar sus productos!

Si lo que quieras es decorar tu cesta de Navidad de la mejor manera para que sea muy original, te damos algunas ideas en nuestro blog.